El zika, también un problema de derechos humanos

Publicado en Clarín, 11.02.2016

Por Mabel Bianco.- La aparición del zika en el Cono Sur nos obliga a considerar qué hacer, cómo y cuándo. El brote epidémico se acerca aceleradamente. El intercambio turístico con Brasil este año fue muy grande y aumenta el efecto del que existe habitualmente. El zika es una enfermedad viral transmitida por el mosquito que produce síntomas inespecíficos como fiebre, quebrantamiento, dolores articulares y de cabeza. En mujeres embarazadas se han registrado casos de microcefalia y otros trastornos neurológicos en el recién nacido asociados a la infección.

Esto hizo que la Organización Mundial de la Salud convocara un grupo de expertos y por la fuerte asociación observada decidió establecer la Emergencia Sanitaria. Lamentablemente, la microcefalia se diagnostica tardíamente, al final del segundo trimestre del embarazo o al principio del tercer trimestre. Algunos gobiernos de la región y de otras regiones solamente recomendaron a las mujeres que no se embaracen hasta por dos anos.

Como problema de salud pública, combatir el zika requiere: eliminar el mosquito, disminuir las posibilidades que pique a las personas, estar atentos a síntomas y consultar al médico tempranamente, explicar a los hombres y mujeres en edad fértil que eviten los embarazos y proveer la información y los métodos para hacerlo, e incluso a quienes se les diagnostique la infección y están embarazadas permitirles optar por interrumpirlo si lo eligen ante el riesgo de las anomalías.

O sea, además de las medidas de saneamiento y médicas, mejorar el acceso universal a los servicios de salud sexual y reproductiva, favorecer el conocimiento y uso de métodos anticonceptivos y garantizar servicios de interrupción del embarazo seguros y accesibles. Para ello el Ministerio de Salud de la Nación, que ha empezado a tomar medidas preventivas, debe adoptar por resolución el protocolo de atención del aborto permitido por la ley desde 1921, según propuesta de la Corte Suprema de Justicia de la Nacion de marzo 2012.

Y articular con las provincias para que en todo el país las personas tengan la misma calidad de cuidado. El problema no es menor y como problema de salud pública es también de derechos humanos, como lo ha reconocido el Alto Comisionado de Derechos Humanos de ONU.