La RedNac participó de la presentación del informe de Estado de la Población Mundial 2021 de UNFPA
“Mi cuerpo me pertenece: reclamar el derecho a la autonomía y la autodeterminación”.
A casi la mitad de las mujeres en países en desarrollo se les niega el derecho a decidir sobre sus cuerpos y sus deseos. Este es uno de los datos que arroja el informe de Estado de Población 2021 del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
El miércoles 14 de abril de 2021 a las 12 hora Argentina, Nayla Procopio, representante de la Red Nacional de Jóvenes y Adolescentes para la Salud Sexual y Reproductiva (RedNac), participó como oradora en el webinario organizado por el Fondo de Población de la Naciones Unidas (UNFPA), en el que se presentó el informe “Mi cuerpo me pertenece: reclamar el derecho a la autonomía y la autodeterminación”, el primero elaborado por Naciones Unidas que se centra en la autonomía corporal.
Según se menciona en la presentación del informe, la autonomía es “el poder y la capacidad para tomar decisiones sobre nuestros cuerpos, sin temor a la violencia o a que alguien más decida por nosotros. Esta falta de autonomía corporal tiene implicaciones enormes más allá de los grandes perjuicios para las mujeres y las niñas en lo individual: una potencial depresión de su productividad económica, el menoscabo de sus habilidades, y los costos adicionales resultantes para los sistemas judiciales y de atención de la salud”.
La introducción estuvo a cargo de Harold Robinson, Director Regional para América Latina del (UNFPA), mientras que Álvaro Serrano, Asesor Regional en Comunicaciones para América Latina y el Caribe fue el moderador y Neus Bernabé, Asesora de Género y Juventud de la oficina regional de UNFPA para América Latina y El Caribe, presentó el informe que puede descargarse desde este link: https://lac.unfpa.org/es/resources/aspectos-destacados-del-estado-de-la-poblaci%C3%B3n-mundial-2021
Algunos de los datos que arroja el informe son reveladores y muestran la situación de vulnerabilidad y de pérdida de derechos de mujeres y niñas en la región:
- A casi la mitad de las mujeres en 57 países en desarrollo se les niega el derecho a decidir si desean tener relaciones sexuales con sus parejas, usar anticoncepción o buscar atención de la salud.
- Únicamente el 75 por ciento de los países garantizan legalmente un acceso pleno y equitativo a la anticoncepción.
- Únicamente alrededor del 56 por ciento de los países tienen leyes y políticas que apoyan la educación integral en sexualidad.
Nayla Procopio comentó el informe desde la perspectiva de adolescentes y jóvenes reflejando las necesidades y barreras con las que se encuentran en la cotidianidad para el ejercicio de una verdadera autonomía
En relación al tema Nayla Procopio comentó: “En les jóvenes la autonomía a veces se ve vulnerada por miradas adultocéntricas sobre nuestros cuerpos, nuestra sexualidad y nuestra capacidad para tomar decisiones. Es importante poder poner el foco en lo intergeneracional, en los aportes que les jóvenes tienen para hacer al diseño de las políticas que marcan y atraviesan sus realidades. Pero sobretodo, entender que son protagonistas de sus propias vidas, que son quienes deben liderar lo que quieren para sí mismes, quienes tienen poder de decisión sobre sus propios cuerpos. Y eso no solo debe ser respetado sino también acompañado con políticas públicas para que esas decisiones se den en el marco de opciones y que sean decisiones informadas.”
“Para poder hablar de poder decidir, tenemos que hablar de accesos. De accesos a la educación, a la información, de acceso al conocimiento sobre nuestros derechos, a vincularnos con otres, a tener herramientas que nos permitan defender y ejercer nuestros derechos de manera personal pero también de manera colectiva”, agregó.
“Creo que si hay algo en lo que se ha ido avanzando es en la lucha por un empoderamiento, como aquello que hace que nos afiancemos en lo que queremos, de manera plural y colectiva. Que nos habilita a desafiar los mandatos que se nos imponen. Porque todos esos mandatos, que los vemos en los estereotipos de género, nos impiden poder decidir libremente, nos cargan de presiones sobre lo que debemos ser y lo que debemos querer. Son esos mandatos los que están en disputa y por los que trabajamos todos los días. Desafiamos el mandato de belleza hegemónico, abrazamos la diversidad de cuerpos, de orientaciones sexuales, de identidades de género, rechazamos la maternidad como mandato, apostamos a una canasta amplia de métodos anticonceptivos, a poder elegir, cuándo, dónde, y con quién. El poder decir que sí, y el derecho a decir que no. Creo que eso refleja la esencia del consentimiento. Y acá es importante remarcar que no solo tenemos el derechos de decir que no, sino que ese derecho incluye necesariamente que del otro lado se respete esa negativa.”
(1: https://lac.unfpa.org/es/publications/estado-de-la-poblaci%C3%B3n-mundial-2021-%E2%80%9Cmi-cuerpo-me-pertenece-reclamar-el-derecho-la)