NUEVAS ESPERANZAS EN LA LUCHA POR LA EQUIDAD DE GÉNERO
(el 24 de febrero, 2011)
Acabar con la violencia machista y ampliar la participación de las mujeres en ámbitos de liderazgo son dos de los desafíos centrales de ONU Mujeres.
Grupos de la sociedad civil señalan que su participación en este proceso es clave y demandan mecanismos formales para que se escuchen sus propuestas.
El lanzamiento formal de ONU Mujeres, celebrado anoche en Nueva York, es una importante conquista de los grupos de mujeres que trabajan en todo el mundo para acelerar la igualdad entre mujeres y hombres, una meta que está demorando demasiado en lograrse.
«Hoy celebramos la creación de ONU Mujeres, algo por lo que agrupaciones de mujeres de todo el mundo estamos trabajando desde que, hace seis años, se anunciara la reforma de la ONU. Esto es un logro de la lucha de las organizaciones de mujeres, por eso queremos ser parte al igual que los gobiernos. Los gobiernos pasan, las organizaciones de mujeres continuamos luchando y trabajando con y por las mujeres», dijo Mabel Bianco, presidenta de la Fundación para Estudio e Investigación de la Mujer – FEIM y representante para América Latina de la Campaña GEAR(Gender Equality Architecture Reform).
La puesta en marcha del nuevo organismo de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de la Mujer renovó las esperanzas de quienes por mucho tiempo han bregado por ampliar y hacer respetar los derechos de las mujeres. Su directora ejecutiva, Michelle Bachelet, tiene la capacidad y el apoyo de líderes y activistas de todo el mundo para conducir el cambio necesario para que todas las mujeres gocen de todos sus derechos. “Las mujeres latinas estamos orgullosas de que una latina tenga este desafío, pero sabemos que será difícil porque los gobiernos no aportan lo suficiente para hacer los cambios en los países”, opinó Bianco.
La creación de ONU Mujeres es un hito histórico para el movimiento de mujeres y se espera que juegue un rol clave en la mejora de las condiciones de vida de las mujeres y en el impulso de una participación más destacada de las mujeres en los espacios de decisión y poder. «Alrededor del mundo hay demasiadas pocas mujeres sentadas en las mesas donde se toman decisiones sobre paz, comercio o cambio climático», dijo Bachelet durante su discurso en la 55 sesión de Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer.
Las organizaciones de la Campaña GEAR demandan que se establezcan marcos institucionales y mecanismos formales de participación significativa de la sociedad civil y con ese objetivo le presentaron a Bachelet, en noviembre de 2010, un documento con recomendaciones para que este proceso se aplique a nivel local y global. En Argentina ya comenzó el período de consulta a la sociedad civil y hay expectativas por que las sugerencias sean tenidas en cuenta para la planificación y la puesta en marcha de las acciones.