“La principal prioridad para América Latina y el Caribe debe ser acelerar la eliminación de la pobreza y la desigualdad, y la aceleración de la inclusión de las mujeres y las niñas a través de políticas de acción afirmativa”, dijo Bianco y pidió garantizar la inversión en salud y educación para mujeres y niñas y por el acceso a servicios de salud sexual y reproductiva y educación sexual integral.

Por otra parte, Bianco señaló otra prioridad para la región: “el aumento del empleo y la eliminación de la informalidad laboral, que en su mayoría afecta a la fuerza de trabajo femenina”. En particular, Bianco subrayó el problema del trabajo de cuidado no remunerado realizado principalmente por las mujeres: “debe ser una responsabilidad compartida de los gobiernos y las familias”, aseguró.

Finalmente, Bianco reclamó “fuerte compromiso de los gobiernos en la asignación de los fondos necesarios y la plena aplicación de políticas eficaces” para terminar con la violencia contra las mujeres y los femicidios en la región. Y exigió el esclarecimiento del asesinato de Berta Cáceres, dirigente de la etnia lenca de Honduras. Su hija, Bertha Isabel Zúñiga Cáceres dijo luego en la sesión que el asesinato de su madre “no fue un hecho aislado” y lo vinculó al proyecto para construir una represa en Agua Zarca en un río que consideran sagrado. 

 

 

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